Sunday, April 25, 2004

Del nimetismo polivalente en ausencia de color:

Respirar.... Exhalar... abrir los ojos... cerrarlos... parpadear... jadear... ver en blanco... sentir en negro... saborear el azul, expulsar el rojo. No sentir... tocar e ignorar la sensacion, ver el sol y no llenarse de alegria, ver la luna y no recibir ninguna mejoria, tener los pies en estado alienigena, en un insipido segundo, con un descolorido minuto, durando una retocada eternidad. Saber que no hay afecto y por lo tanto no me afecta, ver que no tiene sentido y por lo tanto no lo siento, comprender que hoy sali y no encontre salida, regresar a mi entrada y permanecer sin hacer nada. Recordarte y no darme cuenta que te remplazo el recuerdo de mi numero de cuenta, añorarte y olvidar el significado de la palabra, verte y no reconocerte... no reconocerte. Sobervio, ser sobervio, ser indiferente, ser exasperante, carecer de superlativos y diminutivos, no diferenciar, no apreciar, no valorar, el no acompañado del verbo, el verbo complicando y remarcando, alterando y modificando para bien.. para mal.. para mi.. para ti.. mejor corre.

Thursday, April 22, 2004

Soñé que te veía, que lo hacia y me reía, y la risa salía natural, de jubilo y de desahogo, de atenciones sin tensiones. Que me reía y sonreía, esperando a que tú me correspondieras o tan solo me vieras, con ojos, los míos y los tuyos, también sin ellos, esperaba que solo estuvieras. Esperaba volver a respirar de ti, de saborear tu aire impregnado de aroma, de destellos y confabulaciones, esperaba tanto que sentía que añoraba y te deseaba, tanto y tan intenso que desapareciste. Se hizo difícil volverte a traer, vaya que eres renuente. Te sientas, y me siento, y el estar sentido me abre otro camino, y pienso en ti, pero de nuevo ya no estas aquí. Y me aferro y te imploro, te invoco y para variar, me equivoco, esto no ha sido así y no lo hemos sido desde hace tiempo. Y recorro tus calles y me animo a tocar tu puerta, eco de sonido vació, de trasfondo sin sentido, de inútil acción a la que corresponderá la reacción que mas tarde seguramente maldeciré, mejor me tapo los ojos y abro la boca, esperando que no salga de ella tu nombre, aunque ciertamente, hace mucho que no lo digo, mejor a veces solo lo escribo, para no olvidarlo, pero como olvidarte, eso no lo aprendo con el tiempo, mas bien creo que lo remarco, y por poco lo enmarco. Recuerdo tu vestido gris, y mis manos torpes, recuerdo tus platos sucios y mis secas manos, recuerdo tu mecedora y sentarme a verte estremecerme, recuerdo tus labios y como los extrañan los mios, recuerdo tu rodilla y las veces que conte sus pliegues, recuerdo tambien cuanto te molestaba, a veces me acuerdo del mar y otras veces del sentido que le dimos, me gusta recordar el bosque y la asombrosa gama de colores que le aplicaste, me duele tu taza de café y lo mucho que nos gustaba, me ciega el olor de tu pelo incluso en las tardes de ayer, me resigno a esperarte venir y caerme de sorpresa. Entre mi extrañar y la espera, aun habitas, entre mi tiempo y la distancia aun te quedas, entre los dos hoy ya no hay nada, y aquí entre nos, aun me lleva la chingada.

Thursday, April 01, 2004

A veces en mi papel de transeunte cierro los ojos y la rutina desaparece, entre la ausencia de luz en mis retinas el bullicio desaparece quizas guardando silencio, la gente ya no estorba, los sonidos son mas nitidos y perceptibles, pero no es a ellos a quienes busco, cierro mis ojos para verte a ti, para imaginar tu pelo y que mis ojos no vean para que vean tus ojos, que me llegue tu aroma de un vago o vasto recuerdo, de cualquier fuente hacia cualquier lado, para que elimine sensaciones sobre todo la de soledad, desearia que ocupara su lugar pero se que acabara al tener que abrir los ojos. Y te ries y me haces sonreir, y me abrazas y me estremezco, el aire no esta frio y aun asi mi cuerpo reacciona, y te reclama, quizas no tanto como como mis labios, que giran y te buscan, como si contaran con manos, como si pudieran alcanzarte, pero estas tan lejos, y tan ajena, tan inalcanzable. Y toco mi piel esperando que fuera la tuya, pero me arrepiento al sentir la burda imitacion al tacto, y la extraño aun mas. ya no cuento con la vista y el tacto se hace mas fuerte y mas dificil de engañar, con un amargo sabor a recuerdo escucho mi pena, y que pena, no estas aqui, lo sabia desde un principio, pero es que cada vez que cierro los ojos se que te imagino, y cada vez lo deseo con mas fuerza, sera acaso que algun dia, cuando los abra, realmente estes frente a mi, y entonces no tendre que abrirlos de nuevo.